
Duendes y Hadas - Poesía para niños
Hay un duende regordete que con su sombrero y copete, hoy ha venido a contarte la historia de su gente:
Somos los gnomos de la tierra, nos escondemos con cautela, no sea que nos vea tu abuela y nos persiga por toda la sierra.
En el tronco de un madroño vive el hada del otoño.
Aunque llueva o haga frío, coge gotas de rocío y le hace a los animales muchos collares iguales.
Sopla las hojas con celo para que al caer al suelo formen alfombra dorada que cruja con cada pisada.
Va con su prima la ardilla -y una seta por sombrilla- a pasar muchas veces y llenar el cesto de nueces.
Y en el tronco de un madroño duerme el hada del otoño.
